
Ya llegamos a fin de año, fue un período irregular tanto para el equipo, como para el país principalmente por el COVID-19. Aunque el 2020 comenzó con una gran ilusión. En el verano, Colo Colo logró obtener la Copa Chile el 22 de enero, dejando en el camino a la Universidad Católica en semifinales demostrando un buen juego. Luego, la final sería ante el archirrival, confiados en el equipo, los jugadores sacaron el partido adelante con el apoyo de la hinchada que alentó sin parar en el Germán Becker.
Fue un golpe de esperanza para poder ir por el Campeonato Nacional y disputar de buena manera la Libertadores. Pero, creo que nadie imaginaba lo que vendría después. Incluso nos seguimos engañando tras el debut en la liga local con un contundente 3-0 a Palestino. Luego, se fue Mario Salas a fines de febrero, el objetivo era traer a un técnico ganador que pudiera elevar la categoría del equipo. Pero nunca pasó. Aquí ya comenzó la debacle.
Últimos en fase de grupos de Libertadores, problemas del plantel con la dirigencia, la que se encuentra partida entre los bloques del directorio. No se consiguió un DT acorde y seguimos durante un período con un interino. Malas coordinaciones, llegó Gustavo Quinteros a tomar un fierro caliente, entre otras muchas cosas. Lo que parecía ser un buen año, se fue derrumbando poco a poco.
Y ahora aquí estamos, en el fondo de la tabla con muchas opciones de descender pero seguimos firmes, porque tanto como tú que estás leyendo, yo y cada hincha albo que hay alrededor del mundo, no está acostumbrado a esta situación. Tenemos la esperanza de que todo quede atrás y que solo sea un mal recuerdo de un año para el olvido a nivel general. Pero ojo, ya comienza el 2021, el que es una nueva oportunidad para crecer.
Extrañamos la regularidad, ese juego vistoso del equipo del Bichi o llegar a los clásicos confiados como en la época de Guede. Ahora, termina un período pero comienza uno nuevo. Un 2021 en el que el pueblo colocolino desea que sea de salvación y ayude a posicionar al club donde se merece, en los primeros puestos de cada competencia como el club más grande de Chile.